Dr. Fernando Zegers fue reconocido como Maestro Chileno de la Obstetricia y Ginecología 2025
17 / 11 / 2025
El Dr. Fernando Zegers H, director del Programa de Ética y Políticas Públicas en Reproducción Humana, de la Facultad de Medicina UDP, fue distinguido como Maestro Chileno de la Obstetricia y Ginecología 2025 durante el XL Congreso Chileno de Obstetricia y Ginecología: Del bienestar a la innovación, organizado por la Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología (SOCHOG). La distinción reconoció su trayectoria, liderazgo y contribuciones al desarrollo de la obstetricia y ginecología en el país, sumándose al homenaje recibido en 2018, cuando la Sociedad Chilena de Medicina Reproductiva lo nombró primer Maestro de la Medicina Reproductiva de Chile.
La ceremonia se realizó en el principal encuentro nacional del área, donde el Dr. Álvaro Insunza, Past President de SOCHOG, presentó los fundamentos de la elección, mientras que la Dra. María José del Río, presidenta de la Sociedad, entregó el diploma oficial que formalizó el reconocimiento.
El Dr. Zegers afirmó que “después de 50 años como médico, este reconocimiento fue un regalo muy grande que me hicieron mis pares”, y sostuvo que lo recibió no solo como “un reconocimiento a mi pasado, sino como homenaje a lo que en mi pasado he hecho y que me permite gozar de este instante hoy.
A lo largo de su trayectoria, el académico protagonizó diversos hitos que marcaron el campo de la medicina reproductiva. Uno de ellos ocurrió en 2002, cuando representó a la Organización Mundial de la Salud ante las Naciones Unidas en el inicio de la Convención Internacional contra la Clonación de Seres Humanos. Sobre esa experiencia, señaló que la preparación de su exposición ante los países miembros lo llevó a profundizar en el concepto de dignidad humana: “Presenté argumentos científicos para reforzar el valor de ser un individuo único e irreproducible.”
En 2012 volvió a ocupar un rol clave en el debate internacional, esta vez al al actual como perito independiente ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) invitado a defender al pueblo de Costa Rica, luego de que la FIV fuera prohibida en ese país. El Dr. Zegers recordó que “el fallo citó extensamente evidencia científica presentada durante la audiencia”, destacando la relevancia del rigor científico en la construcción de argumentos de derechos y eventualmente, decisiones judiciales. En Chile, también participó activamente en discusiones legislativas relacionadas con el acceso a anticoncepción de emergencia, la congelación de embriones y el aborto en tres causales, enfatizando que “la ciencia siempre debe encontrar un espacio en la discusión valórica.”
Otro momento determinante ocurrió en 2020, cuando fue invitado por el Dalai Lama a un encuentro público sobre ciencia y espiritualidad. Sobre esa intervención, señaló: “Decidí hablarle directamente a él, usando el modelo de la gestación con óvulos donados para explicar la importancia de la coexistencia entre nuestra dimensión individual y única y nuestra dimensión universal que nos une y nos hace parte de un todo. Estas dos dimensiones de nuestra existencia son necesarias para reproducirse y para mantener la especie..”.
Respecto a los desafíos del país en medicina reproductiva, el Dr. Zegers advirtió que “en Chile no existen instituciones capaces de sostener políticas públicas de largo plazo en temas como los desafíos reproductivos, demográficos y su impacto en la estructura social.” Añadió que el marcado descenso demográfico requería atención urgente: “Este fenómeno debería estar en el centro de la discusión país, y ni siquiera apareció en el debate presidencial.” Subrayó que era prioritario crear un organismo independiente que trascienda los gobiernos de turno, y que políticas estables orientadas a facilitar el acceso de mujeres cada vez mayores a la reproducción y fortalecer el cuidado comunitario de bebés y familias.
En relación con el rol de la academia, destacó que la UDP contaba con una posición estratégica para abordar estos desafíos: “La universidad tiene la fortaleza para armonizar la ciencia biomédica con la ciencia psicosocial.” Indicó que la formación de la Facultad de Medicina promovía una mirada integral del ser humano y enfatizó la importancia del componente humanista en la práctica clínica. “La IA hará más fáciles los diagnósticos, pero eso no sana a las personas. Para sanar se necesitan habilidades blandas, humanismo, comunidad y compasión.”
Finalmente, en su mensaje a las nuevas generaciones, el académico destacó la importancia de la actitud frente a lo desconocido. “Valoren y respeten la incertidumbre como parte del proceso de vida.” Añadió que “somos seres únicos, recorriendo la vida por primera vez”, lo que exigía curiosidad, humildad y apertura. Concluyó que “el tratamiento médico no se ordena: se construye de la mano junto al paciente”, destacando la centralidad de la relación clínica en la atención en salud.
